Crónica del Miércoles 7/10/2009

Crónica del séptimo día del Festival. Mis películas: Paranormal Activity y Moon






Se presenta Kinatay, del filipino Brillante Mendoza, ganador el premio al mejor director en la pasada edición del Festival de Cannes por este trabajo. Kinatay retrata el viaje a los abismos de un joven que se ve envuelto en el secuestro, tortura y asesinato de una prostituta.

El británico Philip Ridley presenta su trabajo Heartless, enmarcado en la Sección Oficial. Heartless, una fantasía oscura ambientada en el Londres actual, es el primer trabajo de Ridley desde hace catorce años. El director declaró que había pasado por una época de falta de confianza en sí mismo y que Jim Sturgess, el joven protagonista de la película le había ayudado mucho a superarlo. Ridley comentó que quería recuperar el mito de la muerte y la resurrección en muchas de las escenas en que la critica había querido ver la influencia de Clive Barker. También declaró que el asesinato de su amigo y mánager le acabó de poner en el estado mental adecuado para poder terminar el guión de Heartless.

Se presenta en sesión especial Tetsuo: The Bullet Man de Shinya Tsukamoto, tercera parte de una serie de películas integradas en la corriente cyberpunk más bestia. Si en la primera película el protagonista se transformaba en un hombre de acero, en la segunda en una especie de martillo, en esta tercera parte se transforma en un cuerpo en forma de bala para la guerra.

Tsukamoto, presente en Sitges, declaró que el tema de la primera película era la individualidad; el de la segunda la herencia, que viene después de la individualidad. Ambas películas pertenecen al movimiento cyberpunk de los 80, que trata de la relación entre la tecnología avanzada y el hombre. Esta tercera parte, hecha después de veinte años, quiere mostrar el cambio que ha sufrido Tokyo y como ha ido desapareciendo la gente que vivió la Segunda Guerra Mundial y con ellos su recuerdo. Por eso los temas de esta película son la guerra y la violencia y se muestra un Tokyo asolado por ellas. Tsukamoto declaró la admiración y la influencia de David Cronenberg en su trabajo.

Empiezo el día temprano yendo a la proyección de una las películas que más expectativas crearon al público del Festival: Paranormal Activity, una película que costó 11.000 euros al debutante Oren Peli, un israelí emigrado a los Estados Unidos a los 19 años y que hasta ahora había trabajado como diseñador de software de animación. Peli tuvo la idea para la película cuando en su propia casa creyó escuchar ruidos raros y pensó en grabar en video algunas habitaciones mientras dormía por la noche. La cinta, tras ser proyectada con gran éxito en el Festival de Cine Independiente Slamdance en 2008, fue comprada por Steven Spielberg y Dreamworks; primero con la intención de realizar un remake con más medios, pero estrenada en su forma original tras contemplar la fantástica reacción de los espectadores en un pase público.

Paranormal Activity cuenta la historia de Micah y Katie, una joven pareja que vive en un casa de dos plantas; Katie cree que desde su infancia, de forma intermitente, una presencia sobrenatural la ha estado acechando, especialmente por las noches. Ahora está empezando a notarla de nuevo, con ruidos, pasos, despertares sin explicación durante la noche y con la sensación de estar siendo observada. Micah, para tranquilizarla, decide grabar en video su habitación durante la noche para demostrarle que todo se debe a causas naturales, pero las primeras grabaciones empiezan a demostrar que sin duda hay algo no natural en la casa. Micah decide que puede controlar la situación y empieza a poner pruebas a la presencia sobrenatural, lo que va agravando progresivamente la situación.

La película sólo muestra las grabaciones de Micah con su cámara, dándole un aire de documento. Dado que Micah se demuestra bastante obsesionado con ella, todo queda debidamente registrado. Se ha comparado con bastante justicia esta cinta con The Blair Witch Project, pero a mi entender son sólo comparables por la idea. En Paranormal Activity Peli buscó que la cámara estuviera lo más quieta posible, casi siempre está colocada (o olvidada) en un sitio mientras graba, lo que evita la sensación de mareo del espectador.

A mí Paranormal Activity me generó sensaciones encontradas, en mi opinión triunfa absolutamente en lo más difícil y fracasa bastante en la parte más fácil. Lo más difícil de una película de terror es encontrar un tema que dé miedo y una forma de narrarlo que lo transmita al espectador. Paranormal Activity lo consigue, jugando con la idea de lo que nos puede pasar mientras dormimos, completamente indefensos, con unos planos fijos del dormitorio absolutamente brillantes. La película juega fantásticamente con el sonido, con lo insinuado, con lo que sucede fuera de plano, transmitiendo muchísima tensión.

La lástima es que falla en lo fácil, que es la identificación del espectador con los personajes, que en mi caso falló por completo. Micah es un personaje insufrible, estúpido, creído, vano, que cierra los ojos a la realidad aunque esta lo esté golpeando y Katie es un ser pasivo, que se queja pero no actúa. Sus reacciones no son muy creíbles, especialmente en el tramo final de la cinta. Por desgracia este hecho me impidió disfrutar de una película que técnicamente me pareció muy buena.

Antes del pase de Paranormal Activity, presentada por Ángel Sala, el director del Festival, se ha proyectado el corto El Círculo Goligher con la presencia de Jaime Herrero, su director y Nacho Diago, uno de sus protagonistas. El corto, rodado con estilo de película muda, cuenta un historia muy gótica de terror sobre la una ceremonia realizada tras una muerte. Tanto la historia como la puesta en imágenes me gustaron; el principal inconveniente que encontré fue la música, a ratos algo indigesta.

Por la noche acudo al pase de Moon, que contó con la presencia de su director Duncan Jones y de su actor protagonista, Sam Rockwell. Durante su estancia en el Festival Duncan Jones ha declarado que con Moon ha intentado realizar una película de ciencia-ficción al estilo de los setenta, con un guión que contara algo y un cierto matiz social. También ha comentado que él no se considera un director arty, es admirador confeso de Ridley Scott, David Fincher o Terry Gilliam. Jones comentó que había escogido la Luna como escenario de su película por ser un lugar que todo el mundo tiene como referente y con el que todo el mundo se puede identificar, pero que realmente podría haberse desarrollado en cualquier lugar aislado.

Moon transcurre en un futuro no muy lejano en que se ha conseguido una nueva fuente energética barata y limpia aprovechando el helio-3 que se recolecta de la Luna. Allí, Lunar Industries, la empresa que lo recoge, tiene una base lunar de extracción. La base está muy automatizada, sólo tiene un operario humano que realiza turnos de tres años, ayudado por la inteligencia artificial GERTY. Sam Bell, el astronauta destinado allí, espera con impaciencia que termine el lapso de tres años, especialmente con una hija acabada de nacer y las comunicaciones directas con la Tierra estropeadas. Sam sólo puede recibir mensajes reenviados a través de otros enlaces a través de GERTY. Sam sufrirá un accidente con un vehículo de extracción que provocará que se plantee toda la realidad de la situación, de su identidad y sanidad mental.

Moon es una película excelentemente realizada, que aprovecha cada euro de los 3,4 millones que costó. Como en las películas de los setenta y ochenta usa maquetas, lo que le da un aire muy auténtico. Todo el entorno de la base lunar (interior y exterior) y los equipos tienen un aire que inspira realismo y sugiere uso. La fotografía, el montaje y la banda sonora de Clint Mansell son también excelentes, así como la interpretación de Sam Rockwell, un auténtico tour de force, ya que prácticamente es el único personaje de la película.

¿Qué le falla? A mi entender el guión, que tiene considerables agujeros de lógica y muchos elementos demasiado cogidos por los pelos. También falla a la hora de plantear las supuestas honduras intelectuales de la historia, que plantean temas como la identidad humana, la ética de la ciencia y las corporaciones; estos temas se tratan, pero muy superficialmente. La parte técnica y científica también deja bastante que desear, el guionista demuestra entre otras cosas que no comprende lo que es un ordenador y cómo funciona. De alguna manera, la película se queda a medio camino entre una cinta de aventuras y una película que plantea temas "importantes", como una especie de mezcla algo indigesta de Solaris y Atmósfera cero.

A pesar de ello, su bella factura, lo sólido de la interpretación de Rockwell y su ritmo sin pausas innecesarias la convierten en una película entretenida y fácil de ver, pero mejor no buscarle mucho más.

(c) 2009 Jordi Flotats

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Subido por Jordi Flotats con fecha 21/10/2009 13:24:09